Adiós Meche Al cierre de esta edición, todo hace indicar que doña Mercedes Aráoz se va del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo. De darse este acontecimiento político, varios exportadores la aplaudirán, aunque es casi un hecho que millones celebrarán su partida, como los engañados miembros de comunidades amazónicas y campesinas y sobre todo los involucrados en turismo. Esa actividad que genera más de un millón de puestos de trabajo directos y otros tres millones de empleos indirectos y que para la bella Meche no es más que la Cenicienta de los exportadores, la llanta de repuesto del Mincetur, el refugio perfecto cuando las papas quemaban por problemas en Comex o por las comunidades afectadas por las leyes pro TLC, cuando ella desplegaba su actividad de cóctel y frivolidad para la que tenía un único discurso aprendido de paporreta. Es poco lo que el sector turismo tiene que agradecer a doña Meche, por su falta de visión, por no ponerlo a nivel de decisiones políticas dentro del Ejecutivo como a su vecino el comercio exterior, por seguir siendo parte de un proyecto llamado TLC, cuyos más de 8 años de dedicación solo han traído malestar y atropello. Meche prefirió olvidar que el turismo es generador de más de dos mil millones de dólares en divisas y en cambio creyó ser parte del cóctel y la peliculina. Apostó por rodearse de “López de Romaña”, de mediocridad y no de gente con visión de turismo. Aceptó ser parte del amén gubernamental y no fomentar la prevención de conflictos. Quizá no sea hoy, pero tarde o temprano el turismo le dirá “gracias” a Meche, por no adelantarse a los bloqueos de carreteras, por la cancelación de visitas a Machu Picchu, por las millonarias pérdidas, por permitir que el turismo siga siendo la quinta rueda del coche. Iván Mory Columnista fuente : La Primera